Uno de los grandes anhelos de los habitantes de la provincia, sur del Cesar y zona del Catatumbo es la construcción de la segunda torre para mejorar los servicios, con las distintas especialidades, en el hospital regional Emiro Quintero Cañizares, de Ocaña.

En reciente visita el gobernador de Norte de Santander, Silvano Serrano Guerrero, anunció la firma de un convenio con el fin de efectuar los estudios técnicos y diseños estructurales por $1.000 millones.

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Este compromiso fue ratificado durante los Diálogos Regionales Vinculantes, en los que el alcalde de Ocaña, Samir Fernando Casadiego Sanjuán, solicitó al gobierno de Gustavo Petro la inclusión de ese macroproyecto en el Plan de Desarrollo Nacional, el cual está encaminado a mejorar los servicios a una población superior a 400.000.

 A esa iniciativa se suman los representantes a la Cámara Ciro Antonio Rodríguez Pinzón, Diógenes Quintero Amaya y Wilmer Guerrero Avendaño, quienes participarán en el debate para la aprobación de la carta de navegación del país.

 Expertos en la materia aseguran que se requieren más de $60.000 millones y es necesario el aporte de la nación para alcanzar el tercer nivel de complejidad en el centro asistencial.

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Acabar con paseo de  muerte

La ejecución de un proyecto de esa naturaleza es urgente para evitar el traslado de pacientes hacia otras ciudades del país con desenlaces fatales, agrega el primer mandatario seccional.

 “Es prioritaria la implementación de estrategias para mitigar los riesgos y así salvar vidas humanas contando con aporte de los especialistas en las distintas modalidades”, recalca Serrano.

“Mejorar la infraestructura del hospital significa ampliar la cobertura de atención a todos los usuarios, ya que se constituye en un referente para la región”, señaló.

 En la medida que el centro asistencial adquiera un mayor nivel de complejidad en la atención, no será necesario el traslado de pacientes hacia otras ciudades.

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“Lo ideal es instalar los servicios de alta complejidad aquí en Ocaña. Eso solo es posible si hacemos un equipo entre todos para defender ese patrimonio con la realización de los estudios y diseños para conseguir los recursos a nivel nacional”, dijo el gobernador.

 Fue enfático al afirmar que “para nada le sirvió la intervención de la Superintendencia Nacional de Salud ya que retrasó todo el proceso e instó a los veedores de los servicios públicos estar pendientes de los avances para sacar adelante esas iniciativas.

Ampliar los horarios

El gerente encargado, enfermero jefe José Manuel Galeano Puente, manifestó que el hospital se repone luego de la intervención por parte de la Superintendencia donde se requiere el apoyo del gobierno nacional.

“Con la ayuda de todos vamos a lograr esas metas, ya el gobernador asignó los recursos para los estudios estructurales para levantar la nueva torre. De ahí se desprenderá todas las variantes de acuerdo a las necesidades priorizadas”, reitera.

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Esos análisis determinarán el sitio más adecuado para la edificación que podría ser en el espacio donde funciona la Unidad Mental Pablo VI. También se debe concertar sobre las instalaciones utilizadas por el Instituto Nacional de Medicina Legal que funciona en los predios a través de un comodato gratuito durante hace más de 30 años sin el pago de servicios públicos.

 Debido a la demora en la construcción de la nueva estructura, las directivas tomaron la decisión de ampliar los horarios hasta las 10 de la noche con algunos servicios ambulatorios.

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