Un mes después del desastre ocurrido en la vereda El Tarrita, Invías descartó la construcción de una variante para habilitar el paso de vehículos y mitigar la situación económica.
Si quieres tener acceso ilimitado a toda la información de La Opinión, apóyanos haciendo clic aquí: https://bit.ly/SuscripcionesLaOpinion
Líderes campesinos habían propuesto la apertura de una carretera por otro sector cercano, pero la perforación del sistema rocoso sería demasiado costosa.
El cierre de la arteria vial ha generado grandes pérdidas económicas y solo hasta agosto se vislumbra una solución con la instalación de los puentes militares.
En primera instancia, solicitaron una alternativa, un paso provisional mientras avanza el retiro del lodo, hasta cuando se localicen los cimientos de las estructuras arrastradas por la avalancha y se proceda a instalar los puentes militares.
Además, de conocer cuánto dura la instalación de los puentes metálicos, pues reclaman celeridad porque las pérdidas son cuantiosas, indicó el vicepresidente comunal de la vereda El Tarrita, José Luis Jácome Becerra.
Según Yamil Antonio Galeano Arenas, representante de la Asociación de Camioneros de Colombia, capítulo Norte de Santander, durante el primer mes se perdieron 25 mil millones de pesos, debido a los sobrecostos. El presidente de la Federación de Productores del Catatumbo, Pedro Mauricio Yunis Blanco, aseguró que el impacto en el sector agropecuario es de 1.2 billones de pesos en pérdidas.