Una compleja situación vive campesinos de la zona limítrofe de los departamentos de Norte de Santander y el Cesar debido al diferendo limítrofe surgido hace más de 15 años.
La inconsistencia en el cruce de datos a la hora de las encuestas del Sistema de Identificación de Potenciales Beneficiarios, Sisbén, ponen en jaque a los labriegos de algunas veredas ya que no pueden acceder a los programas sociales de Ocaña.
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Esa base de datos permite clasificar a la población de acuerdo con sus condiciones de vida e ingresos, utilizada para focalizar la inversión social y garantizar que sea asignada a quienes más lo necesitan.
Sin embargo, algunos agricultores de los corregimientos de Otaré, El Palmar, Pueblo Nuevo, Agua de la Virgen y Buenavista, fueron trasladados de manera inconsulta hacia otro departamento. “No sabemos qué camino coger, aparecemos en la franja roja porque ya no pertenecemos a Ocaña”, indica el presidente de la Junta de Acción Comunal de la vereda San Pedro, corregimiento Agua de la Virgen, Rafael Emilio Uribe Navarro.
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Asegura que llevan muchos años con ese deslinde, pero hasta la fecha la lucha ha sido infructuosa por parte de los gobernantes de turno. “Estamos cansados de las promesas falsas de los políticos quienes afirman tener la solución a la mano y cuando llegan al poder, se olvida de nosotros”, precisó.
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