Estos son los incumplimientos del Gobierno Nacional en El Tarrita

Brayan Silva

Pese a que la restitución de tierras para los afectados de la avalancha que arrasó con todo a su paso en El Tarrita el pasado 31 de mayo de 2023 es uno de los temas fundamentales, y que tampoco se le ha dado cumplimiento, no es el único que está sobre la mesa.

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Los habitantes consideran que la lentitud para realizar los estudios correspondientes que permitan tomar decisiones concretas sobre el corredor vial es un incumplimiento.

Al Gobierno Nacional le tomó casi un año comenzar los estudios y no fue sino hasta el 29 de abril que el Instituto Nacional de Vías informó que iniciaba este proceso con una inversión de $846 millones solo para el estudio.

Esto solo del corredor vial; sin embargo, las personas siguen a la deriva sobre si las tierras realmente representan un peligro inminente. Aún no hay evaluaciones de la situación topográfica en El Tarrita. Por ahora, en ese punto, el Gobierno Nacional sigue sin cumplir.

Puentes hamacas: una urgencia

Otra de las urgencias que hay en la zona es la construcción de varios “puentes hamacas” que atravesarían el río Tarra y que los campesinos usarían para trabajar los cultivos en tierras en donde, necesariamente, deben cruzar las aguas.

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Hay familias que no perdieron sus casas y tampoco perdieron sus cultivos; sin embargo, quedaron sitiadas por el río y no hay forma de trabajar el campo para sacar las cosechas y venderlas, puesto que para ello necesitan puentes.

“Yo no necesito que me regalen nada. Yo necesito puentes para poder seguir trabajando con mi cultivo. Eso es lo que yo sé hacer. Yo tengo mi cultivo, pero eso yo lo doy por perdido porque cómo pasamos las cosas. Eso que nos pasó no se lo deseo ni a mi peor enemigo”, reclama entre lágrimas, María Vergel, una habitante de la vereda Brisas de El Tarra mientras vende café a los muleros para poder mantenerse.

Ante los incumplimientos, las personas tuvieron que, de manera artesanal y sin medir los riesgos que ello implica, construir sus propios puentes para poder trabajar.

Se trata de una suerte de teleféricos amarrados a un palo que no está bien incrustado al suelo, y con cuerdas que no tienen una seguridad, más que la de un compañero que al otro lado hala el paso improvisado.

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Es tanta la improvisación, que hace un par de meses un campesino cayó de este artefacto, causándole un accidente que lo dejó con una pierna partida.

Lejos de repararse la falla de origen, y construir estos puentes hamacas, la comunidad siguió construyéndolos artesanalmente para poder seguir trabajando.

Por otro lado, la reubicación de las familias es otro de los aspectos que más urge en la zona. Hay que recordar que en la actualidad hay 135 familias que perdieron todo por culpa de esta avalancha que hoy cumple un año.