Un mes después de que José Mauricio Lizarazo Bastos, de 26 años, salió en libertad, luego de haber respondido por el delito de porte ilegal de armas, fue asesinado de al menos cinco impactos de bala, en el barrio Cerro Norte.
A las 10:00 de la mañana de ayer, los habitantes de la calle 6 con avenida 11, de este popular sector que colinda con el barrio Chapinero, de la ciudadela Juan Atalaya, fueron testigos del ataque indiscriminado contra la víctima, que quedó tendida en unas escaleras.
“El muchacho iba caminando por ahí cuando escuchamos los disparos. Tuvimos que escondernos, porque eso sonaba muy duro y nos dio miedo. Cuando salimos ya lo vimos ahí tirado y de una vez llamamos a la Policía”, recordó un vecino del sector.
Los agresores dispararon sus armas sin ninguna piedad contra Lizarazo, impactándole la cara, por lo que le destruyeron los dientes.
Al lugar del hecho arribaron los miembros de la Brigada Interinstitucional de Homicidios (Brinho) para adelantar las pesquisas y el levantamiento del cadáver, para posteriormente llevarlo al Instituto de Medicina Legal.
La captura
En enero de 2016, la Policía Metropolitana de Cúcuta capturó a José Mauricio Lizarazo Bastos, junto con una mujer, luego de ser señalado por un hombre de robarle su motocicleta a través de la modalidad de atraco a mano armada.
Miembros del Comando de Atención Inmediata (CAI) del Aeropuerto fueron alertados del hurto por la víctima, cuando patrullaban por la calle 18 con avenida 25, del barrio Simón Bolívar. En ese sector sorprendieron al presunto asaltante intentando encender la motocicleta, de marca Suzuki GN 125, mientras que la mujer lo esperaba en otra moto.
Cuando los ladrones se percataron de la presencia de los policías huyeron en las motos, lo que desencadenó una persecución, que terminó en el barrio Paz y Progreso, siendo capturados.
La Policía les incautó a los detenidos una pistola con una inscripción de las Fuerzas Armadas de Venezuela, con la que cometieron el atraco.
Según se conoció, Lizarazo también tenía procesos judiciales del año pasado por lesiones personales, porte ilegal de armas y hurto. En 2014 fue detenido por fabricación, tráfico o porte de estupefacientes y en 2015, por amenazas.
Por ahora, las autoridades avanzan en las pesquisas para esclarecer el hecho y capturar a los autores del crimen.
Entre las hipótesis que analizan los investigadores judiciales está un posible ajuste de cuentas, por lo que esto podría indicar quiénes están detrás de este hecho.