El estruendo que escucharon los residentes de la urbanización Metrópoli y los barrios aledaños, la noche del martes, generó gran preocupación y zozobra. Luego vino el sonido de varias sirenas de la Policía, aumentando la incertidumbre.

Y todo por cuenta de un atentado contra un establecimiento comercial de ese sector de la Comuna 6 de Cúcuta, donde lanzaron una granada y dejaron gravemente herido a José Octavio Arias Muñoz, de 62 años.

El ataque violento

El martes, a las 9:00 de la noche, dos hombres que se movilizaban en una motocicleta, se detuvieron en el Anillo Vial Oriental a la altura del parqueadero ‘La Tapita Mogollón', frente a la urbanización Metrópoli.

Durante varios minutos, esas personas estuvieron analizando el panorama y los movimientos que había alrededor del negocio. Luego se fueron del sitio y después regresaron, pero esta vez, con una granada en la mano.

Lea: El rastro que llevó a la Policía a capturar tres presuntos asesinos en Cúcuta

Sin dudarlo ni un segundo, los hombres lanzaron el artefacto explosivo al parqueadero y huyeron con rumbo hacia la glorieta de la Penitenciaría de Cúcuta, donde luego se perdieron.

La fuerte detonación ocasionó que las esquirlas cayeran en el rostro y el cuerpo de José Arias, quien cumplía las veces de vigilante del lugar, dejándolo gravemente herido.

Rápidamente, el hombre fue trasladado al Hospital Universitario Erasmo Meoz para recibir la atención de urgencia y, aunque luchó por su vida por varias horas, a las 2:00 de la madrugada se confirmó su muerte.

Al sitio llegaron varios oficiales de la Policía Metropolitana de Cúcuta (Mecuc), acompañados de la Brigada Interinstitucional de Homicidios (Brinho) para realizar la inspección técnica de la escena y poder esclarecer lo sucedido.

Otro ataque al mismo negocio

Se pudo conocer que el año pasado, la dueña del establecimiento comercial habría sido víctima de extorsión, pues presuntamente le exigieron sumas entre $20 y $30 millones.

Como el pago nunca se realizó, finalizando el año, su papá fue víctima de un atentado del que pudo recuperarse, pero le habría tocado abandonar la ciudad y el negocio duró cerrado por un par de meses.

Conozca: Una riña en el parque principal de Villa del Rosario dejó un muerto y un capturado

Disparos al aire

Según algunos vecinos de la zona, este año, el lugar estaría funcionando como un amanecedero, el cual estaría siendo frecuentado por personas que llegan en lujosas camionetas y que realizan disparos al aire en las madrugadas.

“Ahí llegan puros bandidos, guerrilleros y gente de dudosa procedencia. Incluso, por los tiros que echan, la Policía les cerró el negocio como por diez días. Como vecinos hemos hecho esas denuncias muchas veces, deberían clausurarlo”, comentó un líder de la zona.

¿Extorsionados?

Aunque todo apuntaría a que sería una extorsión la hipótesis principal, las autoridades no descartan que pueda tratarse de un ajuste de cuentas entre bandas criminales.

Además, analizan si el parentesco familiar de ‘Alicate’, como le decían a la víctima, con alias Cepillo, también pudiese estar relacionado en el hecho.

Se lo atribuyeron

Las amenazas que recibió el presidente de la asociación de víctimas de Norte de Santander, Olguín Mayorga, la mañana de ayer, se conectaron al lanzamiento de la granada. Al parecer, el líder recibió por medio de una llamada, una sentencia por parte de quien sería el segundo al mando del Clan del Golfo.

Supuestamente, además de declarar como objetivo militar a Mayorga, se habría atribuido el ataque violento que se registró la noche del martes en el parqueadero, asegurando que le pasaría lo mismo, a él y a su familiar, si no deja de representar a las víctimas del departamento.

Gracias por valorar La Opinión Digital. Suscríbete y disfruta de todos los contenidos y beneficios en https://bit.ly/SuscripcionesLaOpinion