Ante la escalada terrorista con la quema de vehículos, secuestros, extorsiones y muerte de soldados, integrantes de la Asociación de Municipios de la provincia de Ocaña, sur del Cesar y zona del Catatumbo solicitaron retomar de manera urgente los diálogos de paz con el Eln.
El alcalde de Ocaña, Emiro Cañizares Plata repudió esas prácticas y solicitó a los violentos verdaderos gestos de paz y reconciliación. “El diálogo es la única salida al conflicto armado y por eso es urgente el cese bilateral del fuego para lograr la convivencia pacífica de los pueblos”, agregó.
A ese clamor se ha unido el obispo de la Diócesis de Ocaña, monseñor Orlando Olave, quien está dispuesto a interceder para llegar a acuerdos concretos y frenar el derramamiento de sangre e injusticias sociales registradas en el territorio.
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El presidente de la Asociación de Personeros del Catatumbo, Jorge Armando Bohórquez Lanzziano reclamó la participación en las mesas de diálogo como conocedores del contexto para facilitar los encuentros y soluciones conjuntas en aras de una transformación de la zona.
No dejar ruedas sueltas
El alcalde de Ocaña celebró que se mantenga el diálogo con las disidencias de las Farc y promulgue el cese bilateral del fuego.
En una reciente visita al Comisionado de Paz, Otty Patiño, los 16 mandatarios de la subregión del Catatumbo expusieron la situación. “Esta es una región que ha sufrido mucho los rigores del conflicto y se requiere un acercamiento con todos los actores armados para generar tranquilidad”, reiteró el mandatario ocañero.
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Cuando no se ha pactado un cese de hostilidades se presentan riesgos y situaciones como las que lamentablemente ya están ocurriendo con el Eln en la región. “Hacemos un llamado a las partes para que este proceso, en el marco del respeto por que no es competencia nuestra, única y exclusivamente facultad del presidente de la República, se agilice y qué bueno fuera para la región que se llegara a un acuerdo definitivo tanto con el Eln y las disidencias de las Farc, pues generaría mucha tranquilidad a este territorio”, recalcó.
Una paz con justicia social
El representante de la Asociación por la Unidad Campesina del Catatumbo, Asuncat, Olger Antonio Pérez Quintero, recibió con mucha esperanza el acuerdo en el sexto ciclo de conversaciones con la mesa de diálogo entre el Gobierno nacional y el Estado mayor central de las Farc de prorrogar por 6 meses más el cese al fuego bilateral.
“Valoramos que las partes sigan escuchando a las comunidades para buscar una salida política a este conflicto social y armado de más de 50 años en el país. Recibimos con inmensa alegría, pero también se hace necesario que esos acuerdos se hagan realidad con las transformaciones territoriales”, dijo.
Impacto socioeconómico para la región
El líder y defensor de los Derechos Humanos, Nelson Enrique Arévalo Carrascal reclamó la presencia efectiva del Estado y el acompañamiento de las autoridades a la gente trabajadora de la región. “Sentarse nuevamente en la mesa con el Eln y demás organizaciones del territorio es prioritario, lo pide la sociedad civil y los campesinos cansados de esos oleajes de violencia”, recalcó.
Los dirigentes consideran que fenómenos como el secuestro y la extorsión generan estancamiento social y económico en la provincia de Ocaña, sur del Cesar y zona del Catatumbo.
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“Es lamentable lo que está ocurriendo en la zona donde secuestran a gente trabajadora y humilde, campesinos que han dedicado toda su vida a labores del campo y nunca han hecho daño a nadie”, manifiesta.
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