Es preciso afirmar que La Ínsula, uno de los barrios que conforman la Comuna 6 de Cúcuta, es la cuna de los ‘cráteres’ más grandes de toda el área metropolitana de la capital de Norte de Santander, una problemática que enfrenta desde hace al menos 30 años y que ninguna de las diferentes administraciones municipales ha querido atender.

Son dos los motivos principales que explican el mal estado de la malla vial de este sector, el primero es lógicamente la falta de mantenimiento a la capa asfáltica y, el segundo, es la gran cantidad de camiones, buses y busetas de transporte público que se movilizan por esa zona.

Lo anterior se debe a que a través del tiempo, La Ínsula se convirtió en un gigantesco taller de mecánica automotriz a cielo abierto, donde los conductores de buses, carros, camiones, entre otro tipo de vehículos, se dirigen hacia este sector para hacerles mantenimiento.

Tormento para la comunidad

Para Carlos Eduardo Rincón Forero, presidente de la Junta de Acción Comunal (JAC), esta situación afecta en todos los sentidos a la comunidad, específicamente a la movilidad, “porque entrar al barrio se hace muy complicado por la cantidad de huecos que hay”.

La situación se agudiza cuando se presentan fuertes lluvias, los cuales afectan todavía más el estado de los vehículos, pues el agua oculta la profundidad de los huecos, haciendo que las calles se vuelvan unas verdaderas ‘trochas’ intransitables.

“Cuando uno pide un servicio de taxi y dice la dirección, automáticamente lo bajan a uno del carro, porque muy pocos taxis se atreven a venir para acá”, comentó un residente de la zona. 

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Una situación parecida ocurre con el comercio de la zona, ya que debido al caos en las calles, las ganancias de los pocos establecimientos comerciales que hay en La Ínsula han disminuido a comparación de hace años atrás.

En el marco de los encuentros ciudadanos para el Plan de Desarrollo Municipal, de la administración de Jorge Acevedo, tanto Rincón Forero como los otros integrantes de la JAC, priorizaron el estado de las calles como la problemática que más perjudica a la comunidad.

Arreglos que no bastan

La Secretaría de Infraestructura informó que en el Plan de Desarrollo, entregado por el Concejo de Cúcuta, se dejó estipulada la recuperación de 100 kilómetros de malla vial, por donde pasen las rutas del transporte público municipal.

Esto significa que al menos parte de la vía principal y parte de la entrada del barrio podría ser recuperada, pero faltan las otras seis cuadras que conectan a este sector de la ciudad, que desde hace muchos años vienen luchando por una recuperación de las vías.

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