En Norte de Santander, 51 de cada 100 hogares se consideran pobres, pues, el 50,9% de los consultados por la Encuesta de Calidad de Vida (ECV), en su versión 2023, expresó sentirse así, lo que se traduce en 261.626 familias de 514.000.
De acuerdo con el informe entregado por la directora del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE), Piedad Urdinola, la cifra representa una disminución de 1,4 puntos porcentuales (p.p.) respecto a la ECV de 2022, cuando fue de 52,3%.
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Los departamentos con mayor percepción de pobreza fueron Vichada (87,4%), Chocó (82,8%) y La Guajira (78,9%), mientras que los de menor percepción fueron Bogotá (25,5%), Risaralda (26,8%) y Caldas (28,5%). A nivel nacional, el 47,3% se percibe pobre, por lo que el departamento fronterizo está 3,6 p.p. por encima en el indicador.
Para el economista Mario Zambrano, coordinador de ‘Cúcuta Cómo Vamos’, la disminución de la percepción de la pobreza es importante, pero sigue siendo insuficiente, porque el porcentaje tiene un peso alto y la reducción fue menor que el promedio nacional.
“Ese alto porcentaje tiene implicaciones en la política pública, claramente, por lo que las autoridades deben revisar si todas las acciones que se han desarrollado a nivel departamental han logrado tener un efecto en la percepción de la gente”, destacó Zambrano.
El investigador manifestó que la pobreza subjetiva es clave, porque permite, conocer qué piensa o siente el ciudadano y si hay una conexión entre lo que se hace en materia social y lo que la sociedad percibe frente a esos tipos de políticas.
Crece el pesimismo
Este panorama se suma a la percepción de las familias de la región sobre la situación económica, pues, el 52,3% considera que esta se mantuvo igual en comparación a hace un año, mientras que el 31,8% manifestó que está peor y el 5%, ‘mucho peor’.
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Si se revisa el panorama de la encuesta de 2022, se evidencia un crecimiento en el pesimismo de la población, porque, en esa oportunidad, 28,9% consideró que la situación económica de su hogar estaba peor que 12 meses atrás y el 1,6% opinó ‘mucho peor’. 52,1% de las familias encuestadas por el DANE dijo esa vez que la situación se encontraba igual.
Caída leve del arriendo
Por segundo año consecutivo, la ECV reveló que el tipo de ocupación de vivienda predominante en el país es el arriendo o subarriendo, con 40,3%, mientras que el 39,5% tiene casa o apartamento propio.
Estas cifras representan que la población en arriendo se mantuvo en el mismo nivel, respecto a la ECV 2022, cuando el 40,2% de los hogares vivía en esta condición.
Para el caso de Norte de Santander, las familias que pagan arriendo pasaron de 41,4% (2022) a 38,6% (-2,8 puntos porcentuales), es decir, hay 198.404 hogares de los 514.000 en esta condición. Mientras que el 35,2% habita un inmueble propio (180.928 familias). El año anterior, el índice era de 32,9%.
El gerente de la Cámara Colombiana de la Construcción (Camacol) en Cúcuta y Nororiente, Mateo Montebello, indicó que a los colombianos se les ha hecho mucho más atractivo pagar una cuota mensual de alquiler que una bancaria en crédito hipotecario.
“Tenemos tasas de interés poco llamativas, que han venido bajando, pero las tuvimos en alrededor del 19% efectivo anual. Ya estamos cerca del 12%, la del Fondo Nacional del Ahorro está alrededor del 9%. Según el análisis que hemos hecho, las personas necesitan tasas bancarias de aproximadamente 10% para que puedan hacer su cierre financiero”, agregó.
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Montebello aseguró que mientras los hogares no logren hacer su cierre financiero y continúe la incertidumbre por los cambios en el programa de subsidios de Mi Casa Ya, el arriendo seguirá siendo la opción principal.
El gerente de Camacol resaltó que la vivienda es un medidor de calidad de vida, porque no solo permite a las familias tener seguridad y un techo, sino que se convierte en un activo que les genera valor.
El dato
El tamaño promedio de los hogares colombianos se redujo a 2,90 personas (en el 2022 era de 2,95 personas), continuando la tendencia descendente de los últimos años. Además, el 45,4% de ellos tenía una mujer como jefa, lo que representó un aumento en este aspecto.
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